Hoy cocinamos un plato de carne: unas tiernas chuletas de cerdo y una salsa buenísima, con el delicioso y exótico toque de la canela. La mejor guarnición, unas zanahorias a la plancha.
Ingredientes:
- Cuatro chuletas de cerdo.
- Una cebolla.
- Una cucharada de harina.
- Un vaso de ron negro.
- Dos vasos de caldo de ave.
- Media rama de canela.
- Media rama de canela.
- Aceite de oliva virgen.
- Sal.
- Pimienta negra recién molida.
- Medio kilo de zanahorias.
Preparación:
Comenzamos con la cebolla: la pelamos, lavamos, cortamos en juliana fina, y reservamos.
Salpimentamos las chuletas de cerdo, y las marcamos en una cazuela con un hilo de aceite de oliva virgen. Retiramos y reservamos. En el mismo aceite, freímos la cebolla a fuego lento hasta que esté dorada. Añadimos una cucharada de harina, y removemos hasta que se tueste. Incorporamos las chuletas, regamos con el ron y dejamos que evapore el alcohol durante cinco minutos. Agregamos el caldo y la canela, y dejamos cocer durante media hora.
Mientras se cuece la carne, pelamos, lavamos y cortamos las zanahorias en bastoncitos, y las asamos en la plancha con un hilo de aceite de oliva virgen, retiramos y salpimentamos.
Servimos las chuletas salseadas y acompañadas de la zanahoria.
Consejos:
- La harina se utiliza para espesar la salsa. Hay que cocinarla bien antes de añadir el siguiente ingrediente, porque de lo contrario quedará sabor de harina cruda.
- Si no os gusta tropezar con la cebolla, triturad la salsa, aunque os aseguro que si está bien frita, prácticamente desaparece.
- Si sobran chuletas, podemos congelarlas con la salsa para otro día.
- Otra guarnición estupenda son unas patatas fritas, o asadas.
- Si la salsa queda muy espesa, añade más caldo o agua. Y si queda muy líquida, añade una cucharadita de maizena disuelta en medio vaso de agua fría, a continuación lleva la salsa a ebullición, y listo.
Preparación:
Comenzamos con la cebolla: la pelamos, lavamos, cortamos en juliana fina, y reservamos.
Salpimentamos las chuletas de cerdo, y las marcamos en una cazuela con un hilo de aceite de oliva virgen. Retiramos y reservamos. En el mismo aceite, freímos la cebolla a fuego lento hasta que esté dorada. Añadimos una cucharada de harina, y removemos hasta que se tueste. Incorporamos las chuletas, regamos con el ron y dejamos que evapore el alcohol durante cinco minutos. Agregamos el caldo y la canela, y dejamos cocer durante media hora.
Mientras se cuece la carne, pelamos, lavamos y cortamos las zanahorias en bastoncitos, y las asamos en la plancha con un hilo de aceite de oliva virgen, retiramos y salpimentamos.
Servimos las chuletas salseadas y acompañadas de la zanahoria.
Consejos:
- La harina se utiliza para espesar la salsa. Hay que cocinarla bien antes de añadir el siguiente ingrediente, porque de lo contrario quedará sabor de harina cruda.
- Si no os gusta tropezar con la cebolla, triturad la salsa, aunque os aseguro que si está bien frita, prácticamente desaparece.
- Si sobran chuletas, podemos congelarlas con la salsa para otro día.
- Otra guarnición estupenda son unas patatas fritas, o asadas.
- Si la salsa queda muy espesa, añade más caldo o agua. Y si queda muy líquida, añade una cucharadita de maizena disuelta en medio vaso de agua fría, a continuación lleva la salsa a ebullición, y listo.