domingo, 14 de mayo de 2017

COUS COUS AL CURRY CON POLLO, MANGO Y QUESO HALLOUMI


Esta delicia la descubrí en el maravilloso blog COCIDO DE SOPA, desde el que Yolanda nos ofrece recetas buenísimas, y tan originales como ésta que hoy os traigo. Una combinación de ingredientes sorprendente con un resultado espectacular, sobre todo si te gusta el curry y la mezcla dulce/salado. He cambiado un poco la receta, casi nada, para adaptarla a los gustos de casa, y nos ha encantado. 

En esta ocasión he utilizado queso halloumi con chili que compré en Lidl, picante pero rico. No es un producto que esté siempre a la venta, únicamente cuando hay promoción de productos griegos, aunque este queso es originario de Chipre. Si no os gusta, elegid un halloumi natural, o un buen queso fresco que no se funda en exceso con el calor. La verdad es que no hay muchos sitios dónde vendan habitualmente esta especialidad chipriota en Valencia; yo tan sólo lo he encontrado en el Mercado Central. Sin embargo, recientemente estuve en Londres y me sorprendió ver este queso en las estanterías de Tesco, la cadena de supermercados más famosa por aquellos lares. Además, y aunque yo no lo he comido, sé que es fácil degustarlo en los mercados que abundan en esta ciudad. La próxima vez, no me lo pierdo.

Aunque la lista de ingredientes es larga, la mayoría son condimentos, y las elaboraciones son sencillas, con un resultado buenísimo.

Ingredientes:

- 250 gramos de queso halloumi.

Para el pollo:

- Dos pechugas de pollo.
- Una cucharada de aceite de oliva virgen.
- Una cucharada y media de mostaza antigua.
- Dos cucharadas de mermelada de arándanos.
- Dos cucharadas de salsa de soja.
- Una cucharada de extracto de buey (Bovril).
- Cuatro cucharadas de zumo de limón.  

Para el mango:

- Un mango maduro.
- Una cebolla tierna.
- Una cucharada de comino molido.
- Dos cucharadas de vinagre.
- Aceite de oliva virgen. 
- Una cucharadita de azúcar (si el mango es dulce no es necesaria).
- Una pizca de sal.

Para el cous cous:

- 250 gramos de cous cous.
- 250 mililitros de agua (un cuarto de litro).
- Una cucharadita de curry en polvo.
- Una cucharada de mantequilla.
- Sal.

Preparación:

Comenzamos con el pollo: lavamos y cortamos las pechugas en pequeños dados, mezclamos todos los ingredientes de la marinada (mermelada, mostaza antigua, zumo de limón, extracto de buey, salsa de soja y aceite de oliva virgen), e introducimos en ella la pechuga troceada. Tapamos y dejamos marinar en el frigorífico al menos una hora.

Continuamos con el cous cous: ponemos en cous cous en un recipiente resistente al calor, y lo sazonamos con el curry y media cucharadita de sal. Calentamos el agua hasta que hierva, y la vertemos sobre el cous cous, añadimos la mantequilla y mezclamos con un tenedor. Tapamos el cous cous con un paño, y dejamos reposar durante diez minutos a temperatura ambiente. Transcurrido este tiempo, removemos de nuevo con el tenedor, comprobamos el punto de sazón y rectificamos si es necesario. Reservamos.

Seguimos con el mango: pelamos, lavamos y picamos la cebolla tierna en brunoise y la freímos a fuego suave hasta que esté doradita, con un hilo de aceite y una pizca de sal. Mientras tanto, pelamos el mango, y lo cortamos en pequeños dados, aproximadamente de un centímetro, lo añadimos a la sartén, e incorporamos el vinagre y los cominos. Si el mango es dulce, yo prescindo del azúcar (para saberlo, lo mejor es probar el mango antes de cocinarlo). Seguimos sofriendo hasta que el mango se ablande un poco.

Y vamos con el pollo: tan fácil como escurrirlo de la marinada y saltearlo en una sartén con un hilo de aceite, hasta que esté doradito. 

Y, a la vez que el pollo, cortamos el queso halloumi en pequeños dados y lo doramos en otra sartén con una pizca de aceite.

Una vez tenemos todas las preparaciones, que deben estar calientes, emplatamos. Yo he utilizado un aro de emplatar, primero el cous cous, seguidamente el pollo, después el mango y, para finalizar el queso. 

BUENÍSIMO.

Sabemos lo que comemos: queso halloumi:

Como ya he comentado, se trata de un queso originario de Chipre, muy utilizado en su gastronomía, así como en la cocina de Oriente Medio. Se trata de un queso blando elaborado con leche fresca de cabra y oveja, que se comercializa en salmuera envasado al vacío, y cuya característica principal es su resistencia al calor sin fundirse. Ello permite cocinarlo a la parrilla o frito, obteniendo una corteza crujiente, y un interior blando, pero no derretido. Lo típico en Chipre es degustarlo frito en un hilo de aceite, con unas gotas de limón y hojas de menta. Por supuesto, también podemos consumirlo crudo; una buena idea es presentarlo con una ensalada verde.

Consejos:

- Si tenéis un Lidl cerca, aprovechad para comprar este queso. Normalmente comercializan dos especialidades: con chili y con albahaca. Yo he utilizado ambos, uno en esta receta, y el que tiene albahaca cortado en bastones, rebozado en huevo y pan rallado, y frito en un hilo de aceite de oliva. Deliciosos ambos, y a buen precio.

- Picar en brunoise es cortar las verduras en pequeños daditos uniformes de unos cinco milímetros. 

- Antes de poner azúcar al mango, creo que es mejor probarlo crudo porque, si es dulce, no la necesita.

- El extracto de buey, Bovril es el que yo conozco, se encuentra facilmente en tiendas de alimentación. Yo lo compro en Mercadona. 

- Cuándo no he tenido queso halloumi, lo he sustituido por queso fresco de cabra. En este caso, sólo hay que calentarlo levemente en la sartén, y sacarlo antes de que se funda.



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