Os confieso que durante mucho tiempo el bizcocho de yogur se me resistía, sí, el más básico, el más fácil salía de mi horno hecho un mazacote. He sido capaz, con resultado aceptable, de cocinar una carrot cake, una tarta sacher, tarta red velvet, tarta de Santiago, de chocolate y castañas y, en una ocasión no muy memorable, incluso me atreví con una tarta San Marcos (gran osadía). Y coca de llanda, magdalenas, financiers, muffins...(al final os pongo los enlaces de las recetas que tengo publicadas en el blog, que no son muchas). Pero, el bizcocho supuestamente más fácil, no salía.
Al final, la perseverancia ha dado sus frutos y he conseguido un bizcocho muy rico, con un saborazo maravilloso a limón. La perseverancia y, hay que decirlo, la receta de María Lunarillos, a la que desde aquí agradezco profundamente su generosidad al compartirla porque me ha regalado un momento feliz.
Y no me enrollo más, vamos con la RECETA.
Ingredientes:
- Un yogur de limón.
- Una medida de aceite de girasol.
- Un limón.
- Tres medidas de azúcar.
- Tres medidas de harina.
- 15 gramos de levadura química.
*La medida es el vasito de yogur, que limpiaremos y secaremos bien una vez utilicemos el yogur.
Preparación:
Yo utilizo un robot de cocina, pero se puede hacer a mano. Vamos:
- Ralla la corteza de limón (solo la parte amarilla) y exprime el zumo. Reserva.
- Mezcla la harina con la levadura y tamiza.
- Forra un molde con papel de horno.
- Calienta el horno a 180º.
- Bate en el bol los huevos con las varillas.
- Añade el yogur y bate.
- Añade una medida de aceite, bate.
- Añade el azúcar, el zumo de limón y la ralladura, y bate hasta que esté perfectamente integrados todos los ingredientes.
- Añade en tres tandas la harina con la levadura previamente tamizada, y bate después de cada incorporación.
- Cuando tengas una masa homogénea, al molde.
- Espolvorea azúcar por encima, si quieres.
- Y al horno durante 50 minutos aproximadamente, con calor arriba y abajo. Para saber si ya está cocido puedes pinchar con una brocheta el bizcocho; si sale seca, está listo.
- En cuanto puedas manipular el molde sin quemarte, desmolda el bizcocho y deja enfriar sobre una rejilla.
Y disfruta.
Ideas y consejos:
- Puedes utilizar un yogur natural y eliminar o no el zumo de limón. O un yogur del sabor que más te guste, yo estoy pensando en el coco.
- He utilizado un yogur de lima limón de Activia porque no encontré otro en el súper, y el sabor del bizcocho es glorioso. Además el yogur está buenísimo, ha sido un gran hallazgo y ahora no faltan en mi nevera.
- Como ya os he comentado, utilizo un robot de cocina para batir y va genial. También para amasar me resulta imprescindible; el pan de molde lo preparo en casa desde hace unos cuantos años, cada cuatro o cinco días, y es muy útil por la rapidez y el trabajo que me ahorro.
- El molde se forra con papel de horno puesto en cruz, abarcando toda la superficie del molde. Para desmoldar solo hay que estirar del papel hacia arriba, con cuidado para no quemarnos.
- Como os he prometido, os dejo los enlaces a mis otras masas dulces, aunque no soy muy prolija con estas preparaciones:
- Muffins de arándanos y queso crema.
Y, con la Navidad a la vuelta de la esquina, quizás os apetece este tronco de navidad de chocolate y mascarpone, absolutamente delicioso.